…Ganancia de pescadores. Es lo que dice el refranero español. Sabiduría popular arraigada en siglos de experiencia. Con el lockout, perdón con la huelga de los jugadores de la NBA, muchos de estos atletas han vuelto, como el Almendro, a casa antes de la Navidad…

Los hermanos Gasol a Barcelona, Rudy (bueno, este ha regresado a España), Kirilenko al CSKA de Moscú… Incluso los hay más románticos, Parker ha querido ayudar a su equipo, el Villerbeune francés, a volver a lo más alto del baloncesto galo o Calderón piensa en compartir vestuario con Pedro Robles en el Cáceres de la Adecco Oro.

Quizá sea un disparate pero ¿no podría echar la caña el UCAM Murcia y ver si pica alguno? No sé, lo mismo Ricky Rubio se siente atraído por el proyecto universitario murciano. O Dragic; no podría el escolta de los Rockets redimirse de su mal paso por Murcia. También podríamos decirle a Luis Scola que redimiera a la afición pimentonera de sus grandes actuaciones frente al CB Murcia jugando ahora para los murcianistas… y que con él viniera Ginobili, Oberto o Delfino, con este último ya tendríamos el jugón que pedí en artículos anteriores. Tengan en cuenta que este año hay Juegos Olímpicos y un oro en baloncesto tiene más prestigio que un Campeonato del Mundo de la disciplina.

No estoy soñando con traer a las megaestrellas americanas, que tienen el agua y la luz pagada para los próximos años aunque no jueguen, pero que me dice, querido lector, de tantear a algún escolta de segunda rotación que se convierta en Pete Michael del UCAM Murcia. Siempre le podemos decir que somos un equipo pequeño, que hemos hecho un gran esfuerzo por tener a unos jugadores competentes y que, bueno, representamos un poco el espíritu Hoosier. Y hablando del baloncesto universitario… como están Kyrie Irving o Derrick Williams, número 1 y 2 respectivamente del Draft de 2011.

Todo esto es la ilusión de un amante del baloncesto y del equipo de su ciudad, pero tal y como esta la situación en la NBA deberían estar los cazadores murcianos atentos por si se abre la veda. Que no se diga.