Hoy por fin, y después de un movido verano con el 'caso Franch' se resuelve del todo. A cambio de algo más de 100.000€, el joven valor catalán jugarán en Murcia las tres próximas temporadas. Un fichaje ilusionante con mucho futuro y pretendido por media Europa, pero, para ser realistas, le queda mucho camino por recorrer y ‘hacerse mayor’.
¿Qué quiero decir con esto?
Primero: El chaval viene a jugar a Murcia, que no es el Joventut de Badalona. Viene a un club nuevo, recién ascendido, donde seguramente tendrá más galones que en la Penya y por lo tanto, una presión añadida. No le metamos nosotros más aún!
Segundo: Jugar en Murcia le va a hacer madurar sí o sí, ya que aquí el respeto se lo tiene que ganar con minutos de mucha calidad, trabajo y sangre fría. Va a competir el puesto a un ‘perro viejo’ como es Rivero.
Tercero: El UCAM Murcia no es tan respetado como otros en la liga ACB, nos guste o no nos guste. Recordemos que hace un par de meses jugábamos en la LEB Oro y cuando juegas con esta camiseta, para algunos no pasas desapercibido..
Cuarto: Murcia nunca ha sido una sede fácil para el jugador, ya que nuestra afición a cualquier deporte nunca ha sido incondicional, salvo mil seguidores del UCAM Murcia y unos cinco mil del Real Murcia. Me refiero a que como no le vayan bien las cosas, no va a ser fácil para él adaptarse.
Por eso propongo lo siguiente: ¿Por qué no dejamos de decir chorradas de si play off y Copa del Rey y nos centramos en un objetivo realista. Quizá eso haga que nuestros jugadores entiendan desde el principio cuál es la meta viendo a cinco mil personas cada fin de semana animando.
¿Por qué no centramos más nuestra óptica a medio plazo, a que las cosas se hagan en una buena línea e ir creciendo día a día? Quizá el no quererlo todo para ya nos haga perdonar y apoyar a los nuestros..
Porque no miramos a un equipo como Fuenlabrada o Manresa, y tratamos de copiar algunas cosas?
Son algunas cosas que he aprendido en años, pero por favor que nadie me malinterprete, siempre hablo de cómo un aficionado para otro aficionado.
Sigue a Pedro Fernández .
Artículo ofrecido por